Estamos llegando al final… Design Thinking

Después de un trabajo muy interesante y productivo estamos llegando al final del proceso de Design Thinking.

Hemos tenido la suerte de contar con el apoyo de grandes profesionales. Gracias a todos ellos hemos podido validar nuestros prototipos.

Tuvimos una jornada muy interesante el pasado viernes con Propietarios, Directores Generales y Directivos de Via Express, Nebula, Concha Baeza Escritora por Encargo, linkmyjob, Centro Farmaceutico, Maxxium y Movistar.

Disfrutamos todos mucho y aprendimos juntos. Gracias Manolo, Quique, Concha, LuisMi, Ernesto, Marian y Diego.

 

Ventajas creativas para las más pequeñas

 

 

 

 La creatividad es una parte esencial de nuestros negocios. Pero necesitamos que nuestras pequeñas empresas también lideren la creatividad. Design thinking demanda un pensamiento creativo.

Se pueden establecer ciertas tácticas que a las pequeñas empresas les permitan competir con las grandes compañías y corporaciones en materia de creatividad.

Hay ciertas actividades que las grandes empresas no pueden o les es difícil realizar. Las grandes empresas funcionan más en línea con el concepto de departamentos estancos. Así que normalmente el departamento de marketing comunica con su personal: Product Managers, Soporte a Ventas, Customer Experience entre otros, muchas veces aislados de lo que ocurre en el departamento de ventas. Sin embargo, en una pequeña empresa donde muchas veces se comparten los mismos espacios físicos, de una forma habitual o incluso de manera accidental, el personal escucha los retos, las oportunidades a las que se están enfrentando otros departamentos u otros compañeros.

También se asiste a reuniones en las que los participantes provienen de diferentes departamentos. En estas reuniones se aprende a ofrecer soluciones para situaciones de negocio de departamentos diferentes.

Es cierto que algunos empleados ofrecen soluciones e ideas sobre situaciones de las que no son expertos. Eso realmente, aunque se pueda pensar lo contrario, ayuda muchísimo a abrir el abanico de posibilidades y soluciones mucho más creativas. Y al final siempre queda la sintonía fina que pueden ajustar los expertos.

Recomiendo actuar de esta manera, haciendo participar a diferentes empleados de diferentes áreas, para que puedan compartir experiencias y soluciones creativas en situaciones complicadas, programas de mejora, diseño de producto, rediseño de procesos, mejora de la experiencia de nuestros clientes. Un par de veces al año puede generar grandes sorpresas, especialmente de lo que son capaces de hacer nuestros empleados.

También existe la posibilidad de persuadir a nuestros empleados a pensar sobre las necesidades y posibilidades de mejora de otros departamentos de una manera más habitual.

Claro que, para poderlo conseguir es posible que debamos modificar en parte nuestra cultura corporativa.

¿Por qué?

Para poder conseguir que nuestro equipo sienta la libertad de poder expresar ideas que capturen la atención de los directivos o mandos intermedios de los que jerárquicamente dependan o de otras áreas y poder discutir ideas y preocupaciones es muy importante evitar la reprobación cuando se cometan errores. Todo ello facilitará el que nuestros equipos aumenten su capacidad de aprender.

La posibilidad de poder entablar conversaciones abiertas, transparentes y con conflictos gestionados positivamente ayudarán a los empleados a sentirse más tranquilos, seguros y motivados, ofreciendo soluciones para otras áreas diferentes a las suyas.

 

Poder gestionar la creatividad de esta manera va a ser siempre mucho más sencillo hacerlo en compañías de pequeño tamaño que en grandes empresas. Pero para ello se necesita práctica, perseverancia y una determinante resiliencia que permita obtener los resultados buscados. Ese cambio de cultura ayudará mucho a conseguirlos. Compañías con una cultura mucho más inspiradora, y colaborativa son candidatas a obtener grandes ventajas competitivas frente a los más grandes.

Al final, no dejéis de hablar con vuestros empleados para obtener información directa de ellos en cuanto a cómo ayudarles a ser más creativos. Quizás necesiten más flexibilidad horaria, o un tiempo de retiro con el equipo para trabajar esa creatividad. Escúchales sin juzgarles, seguro que se pueden encontrar productividades y facilitar la generación de nuevas ideas. Pero no lo olvides, necesitas esos tiempos de conversación con ellos. Después de todo, la creatividad no tiene valor si nade la comunica.

 

 

 

Cambiando la manera de diseñar procesos

Actualmente las tecnologías, la transformación digital, la industria 4.0 y las nuevas aplicaciones para abordar cambios en procesos, están haciendo que las empresas, o bien estén aumentando su competitividad o la mantengan. Pero una cosa que no ha cambiado, es la necesidad de implementar mejora continua en nuestras organizaciones. Esta ayudará a gestionar el cambio como parte de la vida empresarial.

La Gestión del Cambio en las empresas requiere de educación continua a nuestros directivos corporativos, directivos, mandos intermedios y a la organización en su conjunto. Es muy importante considerar algunas cuestiones básicas para conseguir que un cambio de procesos sea exitoso. Subestimar esas cuestiones puede conducir a la empresa a fracasar en el cambio.

Una vez se define lo que queremos cambiar y el alcance de la acción de cambio, el primer aspecto a considerar es el calendario que queremos tener para el diseño del proceso. Este debería estar bien definido, no demasiado lento pero tampoco demasiado rápido. Al mismo tiempo deberemos enfocar el cambio en aquello que pueda crear y mejorar la propuesta de valor a nuestros clientes.

Más tarde comunicaremos los cambios que estamos implementando al conjunto de la organización. Deberemos considerar a la organización al completo. El factor crítico más frecuentemente ignorado es la necesidad de transmitir un mensaje claro a toda la audiencia – las personas deben involucrarse con el proyecto, ya que dependerá de sus acciones el resultado y éxito del mismo.

La estrategia de la compañía debe considerar y tener integrada con toda claridad la totalidad de los empleados de la empresa, se debe conocer la importancia de los procesos y los niveles de desempeño esperados para  poder entender perfectamente los cambios y el sentido que tienen. Todo ello contribuirá en apoyar las acciones de cambio que las organizaciones requieren implementar.

Podemos construir una hoja de ruta sencilla que nos ayude a implementar los cambios y rediseñar los procesos:

a). El Propietario del proceso será aquel que se encargue de motivar el cambio. El será el responsable de comunicar a la organización el sentido y las razones para implementar tales cambios y también de impulsar el coraje y la determinación necesaria para conseguir el cambio con éxito.

b). Seleccionaremos el Líder de Proyecto adecuado para re-diseñar un proceso y definir el equipo. El equipo deberá poder no solo conducir los cambios sino también poder trabajar todos juntos de una manera cohesionada y efectiva.

c). Asignar los recursos adecuados, instalaciones y tecnológicos para dirigir el proyecto efectivamente.

d). El primer objetivo será eliminar actividades sin o con poco valor añadido que generen costes extra, errores y atrasos.

Antes de comenzar cualquier cambio rediseñando procesos, debemos revisar que somos capaces y estamos preparados para enfrentarnos a un proceso de transformación. Deberíamos revisar aspectos tales como el liderazgo, la cultura, experiencia y habilidades del equipo directivo.

Frecuentemente utilizamos una gran cantidad de tiempo ajustando cosas que no han ido bien, en vez de realizar las tareas y procesos que son parte del trabajo diario. Eso es por lo que muchas organizaciones tienen que realizar un cambio más radical de una manera organizada.

También es necesario definir los indicadores clave que deberán cumplir con unos requisitos:

1.- Alineados con toda la organización

2.- Coherentes con las medidas aplicadas dentro de una estructura jerárquica

3.- Utilizados para impulsar la mejora

Por último, los procesos nuevos o aquellos que se hayan modificado, deberán ser aprobados y finalmente implementados adecuadamente. Consolidar y mantenerlos en el tiempo garantizará los resultados y éxito de los procesos.

Cambiar con eficacia

Todos nos enfrentamos a retos de liderazgo en nuestro entorno global. Hemos reestructurado nuestras organizaciones y a veces, incluso hemos tenido éxito como líderes de esas reestructuraciones. Pero para tener éxito como líderes necesitamos hacer frente a cambios organizacionales, desarrollando y superando retos que aborden el cambio con eficacia.

El siglo XXl nos ha forzado al cambio a causa de una dura competencia. Nuevos productos y servicios ofrecidos por nuestros competidores han hecho más relevantes a estas empresas y por tanto nos han llevado a entrar en nuevas maneras de gestionar nuestras propias compañías.

Es muy importante que nuestras organizaciones no se deterioren en el tiempo hasta el extremo de no poderse recuperar. Por lo tanto, debemos anticipar esos momentos y reorganizarnos mediante estrategias que aseguren que avanzamos de una forma determinante y en la dirección correcta.

Ante estas circunstancias, las personas no somos inmunes al cambio y no los podemos evitar.

Nuestros clientes demandan más y más, y están cambiando muy rápido su demanda. Cumplir con sus expectativas y aspiraciones es una tarea muy difícil y obliga a las empresas a destacar constantemente (o aumentar) su innovación y creatividad para poder estar al día con los cambios en gustos y preferencias de los clientes.

Si quieres crecer, cambiar es esencial.

Muchas veces la gente confunde el crecimiento con el cambio. Es diferente decir “Quiero cambiar de carrera” a decir “quiero crecer con mi carrera e ir cambiando de un lugar a otro.” El cambio es algo que puede ocurrir de una forma muy rápida, mientras que el crecimiento es algo que lleva tiempo y requiere mucho esfuerzo y energía. Coraje es la pasión y perseverancia en el largo plazo. Puedo decir que crecer es como una maratón y el cambio es hacer un sprint.

Ese es uno de los conceptos más importantes en gestión del cambio, el sentido de la urgencia. Necesitamos acelerar el cambio. El tiempo corre en nuestra contra.

Una cosa que tienen en común el cambio y el crecimiento es que los dos implican salir de la zona de confort.

Como siempre digo, la gente suele asumir que el status quo es bueno. Prefieren permanecer sin cambiar, ya que es mejor lo conocido que lo desconocido.

La gestión del cambio es un proceso que consiste en cambiar efectivamente y de una manera exitosa, persuadiendo a las personas a seguir la estrategia definida por la organización. También consiste en crear la correcta coalición y alinear a los empleados para neutralizar la resistencia a los cambios que serán implementados.

La Gestión del cambio y sus líderes deberían crear suficiente confianza entre los empleados para facilitar todas las acciones que pueden conducir al cambio requerido con éxito. Tratarán de cumplir con las necesidades de motivación de su gente.

Los líderes tendrán que actuar con optimismo y guiar a las personas hacia delante con confianza. Ellos definirán e implementarán una clara y consistente estrategia con una visión y misión bien definida.

Todos los lideres involucrados en cualquier proceso de gestión del cambio deben estar siempre al lado de su gente durante el periodo de transición, creando confianza y seguridad. Deben ser apasionados y conquistadores respecto al cambio. Tendrán que unirse a sus empleados durante el proceso del cambio y hacerles sentir parte de él.

Y al final, asegurarse de que el cambio se produce por completo, sin que ningún cuello de botella impida el proceso.

No subestimes la resistencia al cambio.

Asegurar el proceso del cambio requiere de líderes flexibles y adaptables, que puedan liderar situaciones y personas con éxito. Si ellos comunican con pasión y dejan las cosas claras para las personas, la implementación del cambio será mucho más fácil. Si ellos dan buen ejemplo, crearan confianza en las personas.

Los líderes deben tener desarrolladas unas buenas habilidades de comunicación, deben ser resilientes, delegar, compartir la visión, motivar a los demás y hacer del cambio una parte de la cultura de la organización. Deben ser competentes y estar seguros de sí mismos. Deben aprender a priorizar sus tareas y concentrarse estrictamente en el cambio. Es también esencial mostrar y celebrar pequeños éxitos para motivar a los demás. Deben asumir riesgos y aprender a superar las barreras que puedan aparecer en el proceso de cambio, siendo también analíticos con habilidades de resolución de problemas y observadores de la globalidad.

Sobre todo, los líderes del cambio deben ser apasionados en su esfuerzo para hacer que el cambio sea fluido y exitoso.

El cambio es inevitable y los CEOs de las grandes compañías deben ser más astutos que los de sus competidores para enfrentarse a futuros retos.

Controlando los cambios

Es lunes por la mañana y comienza la semana. ¿Has pensado cómo controlar todos los cambios que se están produciendo en tu empresa?

Todas las compañías que abordan cambios con éxito, llevan a cabo procedimientos de control de dichos cambios. Por ejemplo, todos los proyectos suponen cambios, y estar bien provistos de las herramientas adecuadas para enfrentarse a esos cambios, es crucial. Un error común en las empresas es la falta de los adecuados procedimientos, lo que puede causar que muchos proyectos no lleguen a buen término. Si te anticipas a ello, podrás salvar mucho tiempo y recursos.

Pero no te preocupes, desde Muvens te podemos ayudar. Tenemos todas esas herramientas y la experiencia de haber ayudado a muchas empresas a efectuar cambios de una manera exitosa.